Por Luis Mellado
Una de las características de un buen líder es identificar y valorar el potencial de la gente con la que trabaja. Es muy probable que la gran mayoría de nosotros estamos sirviendo como líderes porque alguien, en algún momento, vio un potencial en nosotros y nos encaminó hacia el desarrollo del liderazgo.
Pero una de las mayores frustraciones para un líder es ver el potencial en alguien y ver que está atorado o atrapado, y en vez de crecer y cambiar, se encuentra muy lejos de su potencial.
En su excelente sesión de La Cumbre Global de Liderazgo titulada “Liderando de adentro hacia fuera” Sam Adeyemi habló de cómo liberar ese potencial en otros.
Sam compartió que es cuestión del sentido de identidad de cada persona, y que la dinámica del liderazgo funciona cuando se alinea el sentido de identidad del líder con el de los seguidores. Cuando esto ocurre, podemos hacer campeones de gente ordinaria.
En esta ocasión veremos tres recomendaciones de cómo lograrlo.
- Primero, necesitamos reconocer que el cambio viene de adentro hacia fuera. El cambio en el comportamiento (lo que vemos en lo exterior), viene cuando ha ocurrido un cambio en el interior – la manera de pensar y de vernos a nosotros mismos.
El simplemente pedir a alguien un cambio en su comportamiento no funciona, porque quizá se comporte por un tiempo de acuerdo a lo que le pedimos, pero no es algo permanente, porque no hay un cambio en su interior.
- Segundo, necesitamos reconocer que el cambio en las personas viene de acuerdo a lo que ven y escuchan a lo largo del tiempo. Cuando el líder logra dar a sus seguidores la habilidad de verse a sí mismos de otra manera – de quiénes son, de lo que poseen, y de lo que son capaces de lograr – la transformación viene a sus vidas.
Porque lo que creemos de nosotros mismos es en lo que nos convertimos. Todo comienza cuando el líder habla a las personas sobre el potencial que ve en ellos repetidamente y a lo largo del tiempo y los anima a vivir de acuerdo a ese potencial.
- Tercero, necesitamos compartir nuestra visión de nuestros seguidores y de nuestra organización una y otra vez. Tus seguidores deben encontrar una nueva identidad dentro de la visión que Dios te dio. Invítalos a tomar su lugar en esa visión.
Capacítalos para que puedan crecer y realizar su potencial, modela la transformación en tu propia vida, y motívalos a seguir desarrollándose. Sam Adeyemi mencionó que nadie debe estar contigo por un año o más sin ver transformación en su vida. ¿Qué es lo que ven y escuchan tus seguidores?
2017. La Cumbre Global de Liderazgo en PIB Satélite.