Escrito por Luis Mellado
No cabe duda de que la Navidad es la temporada más esperada y celebrada en la mayor parte del mundo. Hay muchos adornos, fiestas, regalos y reuniones especiales. Pero en medio de tanta actividad, se puede comenzar a perder el verdadero significado y tesoro de la Navidad.
Quizá para algunos comerciantes, esta temporada significa la oportunidad de tener las mejores ventas del año. La música navideña suena en los altavoces de las tiendas, despertando la nostalgia y a la vez la generosidad en los consumidores.
Pero, ¿de eso se trata la Navidad?
Cuando indagamos el origen, la razón y el verdadero mensaje de la Navidad descubrimos cosas mucho más profundas y valiosas. Entre las cosas que descubrimos está la esperanza.
La esperanza de restauración a un mundo caído. La esperanza de paz a un mundo violento. La esperanza de un amor incondicional a los corazones heridos y solitarios. La esperanza de una seguridad y fortaleza firme en tiempos inciertos.
El origen de la Navidad es el nacimiento de Jesucristo. Cuando Jesús nace, un ángel se aparece a unos pastores que velaban a su rebaño. El relato Bíblico en Lucas capítulo 2 dice: Y repentinamente apareció con el ángel una multitud de las huestes celestiales, que alababan a Dios, y decían: ¡Gloria a Dios en las alturas, y en la tierra paz, buena voluntad para con los hombres!.
La celebración comenzó en el cielo – el cielo se puso de fiesta con el nacimiento de Jesús.
Estas huestes celestes, o multitud de ángeles, alabaron a Dios. El significado de la palabra “alabar” incluye exaltar o cantar alabanzas en honor a Dios. El texto no nos dice si los ángeles cantaron aquí dentro de su alabanza, ¡pero imagínate como se oyó eso! Los ángeles alabaron porque entendían la magnitud de lo que ocurría: Dios estaba restaurando por medio de su Hijo Jesús, la relación con la raza humana que se había roto desde el jardín del Edén. Y junto con eso, el principio de la restauración y la esperanza para un mundo caído.
Aquí vemos a Dios en acción, y los ángeles hicieron la primera fiesta navideña. Pero los ángeles no sólo alabaron a Dios, sino declararon “paz y buena voluntad para con los hombres.” Si deseas saber cuáles son las intenciones de Dios para la humanidad, aquí está: paz y buena voluntad.
Cuando experimentamos la paz de Dios, podemos estar en paz con nuestros prójimos. Cuando experimentamos el amor de Dios, entendemos que no estamos solos, que nuestras heridas pueden ser sanadas, y que podemos extender ese amor a otras personas.
Cuando enfrentamos la incertidumbre y los tiempos difíciles, podemos estar firmes en la esperanza y la fortaleza que viene de Dios porque sabemos que sus intenciones y sus planes para nosotros son buenos.
Lo que permite que esto suceda a nivel personal, es un corazón abierto que cree y recibe. Jesús nació en un pesebre porque no había lugar para él en el mesón. ¿Habrá lugar en tu corazón para Él en esta navidad? Te deseo una feliz Navidad, llena de esperanza y paz.
Y ahora, concebirás en tu vientre, y darás a luz un hijo, y llamarás su nombre Jesús. Este será grande, y será llamado Hijo del Altísimo; y el Señor Dios le dará el trono de David su padre; y reinará sobre la casa de Jacob para siempre, y su reino no tendrá fin.
Lucas 1:31-33
Luis Mellado es Director Regional para México en La Cumbre Global de Liderazgo. 2022.